“Florecer en otoño”

(De Miguel Rottenberg)

El amor no tiene edad. En la pubertad todo es descubrirse, en la adolescencia es energía y vigor, en la adultez es compañía y en la vejez es valoración y respeto sumado a muchos condimentos de las anteriores etapas.

Nos encontramos con Esther acompañada de su nieto, quien es recibida en una residencia para mayores. Allí, resignada, asume su vida como cumplida y que solo resta esperar. Alguna que otra vez la visitan su nieto y su nieta. En la residencia conoce a Ada, una luchadora incansable y que intenta cambiar su ánimo y contagiarle su rebeldía. Y también conoce a Jes, un jardinero, ex boxeador y anarquista que intentará conquistar su corazón.

La vejez también es un tiempo de florecimiento a cuesta de no esperar el fruto, pero es tiempo aún para crear, enseñar, dar y recibir, amar y perdonar. Pero los preceptos de una vida conservadora sumado a un patriarcado ejercido por su desaparecido marido, tornan difícil a Esther retomar su senda cuasi adolescente.

La frescura de Jes y el oportunismo de Ada en contrapunto con la rigidez de Greta, tornan a esta comedia divertida, romántica y esperanzadora. Creo firmemente que el mensaje de Miguel Rottenberg es finalmente ése.

El juego de luces y la escenografía conforman una atmósfera ideal para el desarrollo de la obra.

Correcta Alicia Toker envuelta en su papel de Esther junto a Alicia Naya como Ada, dando el contrapunto femenino en escena. El inefable Guido D’Albo como Jes, rompiendo esquemas con su habitual frescura sumado a la oportuna participación de Alcira Serna y Owen Toledo.

Todos los sábados a las 17 hs. en el teatro El tinglado (Mario Bravo 948. CABA). Gracias por la invitación y por haber podido disfrutar de un hermoso espectáculo.